El pasado 30 de octubre, Ana Guerra y Víctor Elías celebraron su boda en una ceremonia íntima y religiosa en la ermita de la Virgen del Puerto. Este momento especial estuvo rodeado de familiares y amigos cercanos, seguido de una celebración memorable en la finca Prados Moros, con la asistencia de muchas personalidades del mundo del espectáculo.

Víctor Elías rinde homenaje a sus padres fallecidos en su emotiva boda con Ana Guerra

Ceremonia íntima en la ermita de la Virgen del Puerto

Ana Guerra y Víctor Elías unieron sus vidas en una ceremonia religiosa el 30 de octubre, donde solo estuvieron presentes los familiares más cercanos y amigos íntimos. Este evento significativo marcó el inicio de su nueva vida juntos, con un ambiente cargado de amor y emociones. La elección de la ermita de la Virgen del Puerto como lugar para este momento especial refleja el deseo de la pareja de mantener la esencia de una celebración íntima y significativa.

Fiesta en la finca Prados Moros con celebridades

Posteriormente, los recién casados celebraron una exuberante fiesta en la finca Prados Moros, ubicada en la Sierra de Guadarrama. Este recinto, conocido por su belleza natural y espacios cuidadosamente decorados, recibió a numerosos invitados del mundo del espectáculo. Entre los asistentes se encontraban rostros reconocidos como Fran Perea, quien desempeñó el papel de maestro de ceremonias, y varias personalidades del casting de 'Operación Triunfo 2017', además de ilustres invitados como Arturo Valls y Rossy de Palma.

Ausencias significativas en un día especial

A pesar de la alegre celebración, algunas ausencias se hicieron notar entre los invitados. La pareja tuvo que lidiar con la no presencia de Aitana Ocaña y Lola Índigo, quienes, a pesar de recibir invitaciones, decidieron no asistir. La ausencia más sentida fue la de los padres de Víctor Elías, fallecidos años atrás. Este aspecto fue recordado por el actor, quien expresó su deseo de que sus progenitores estuvieran con él en este día crucial. Víctor fue acompañado al altar por su tía y madrina, Carolina Caparros, lo que subrayó la importancia de la familia en este evento.

El vínculo musical que une a la pareja

Ana y Víctor, además de seres queridos, son también una pareja musical. Durante la celebración, la música jugó un papel fundamental, con Víctor tocando el paseo nupcial en el piano mientras Ana se acercaba emocionada a él. La relación entre ambos surgió de una colaboración profesional, aunque inicialmente existían prejuicios que ambos superaron con el tiempo. La pareja ha tratado de mantener su amor en secreto, pero su conexión ha sido fuerte y les ha permitido convertirse en un dúo artístico bien conocido en el panorama musical español.